La Stasi: el aparato de vigilancia más perfeccionado de la historia

DAVID RAUDALES
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28 de diciembre de 2025

La Stasi, el Ministerio para la Seguridad del Estado de la República Democrática Alemana (RDA), fue uno de los servicios de inteligencia más eficientes y represivos del mundo, con una red de informantes que llegó a involucrar a uno de cada seis ciudadanos. Así lo expone el documental "La Stasi: el ojo que todo lo veía", producido por DW Documental y publicado en YouTube, que combina archivos desclasificados, testimonios de víctimas y exagentes, y reconstrucciones para mostrar el alcance de este sistema de control totalitario.

El reportaje explica cómo la Stasi, fundada en 1950 bajo la influencia de la KGB soviética, evolucionó hasta contar con más de 91.000 empleados a tiempo completo y una red de informantes no oficiales (IMU) que se estima en hasta 620.000 en su punto álgido, en un país de apenas 16 millones de habitantes. Su lema era "conocerlo todo", y para lograrlo empleaban métodos como escuchas telefónicas masivas, apertura sistemática de correo, cámaras ocultas, micrófonos en hogares y hasta "muestras olfativas" (frascos con olores corporales para que perros rastreadores identificaran a disidentes).

El documental destaca casos impactantes, como el de disidentes que eran vigilados 24 horas al día, o el uso de la "Zersetzung" (desintegración psicológica): tácticas sutiles para destruir la vida de opositores sin arrestos directos, como difundir rumores, sabotear carreras profesionales o provocar divorcios. Entrevistas con víctimas revelan el paranoia colectiva que generaba este sistema, donde vecinos, amigos e incluso familiares delataban por miedo, convicción ideológica o beneficios materiales.

También se aborda el rol de la Stasi en la represión de la oposición, como durante la construcción del Muro de Berlín en 1961 o las protestas de los años 80. Tras la caída del Muro en 1989 y la reunificación alemana, los archivos de la Stasi —que ocupan más de 111 kilómetros de estanterías— se abrieron al público, un hecho único en la historia de servicios secretos. Hoy, miles de personas han consultado sus expedientes para descubrir quiénes los traicionaron.

Exagentes entrevistados justifican sus acciones como "defensa del socialismo", mientras víctimas expresan el trauma duradero. El documental concluye reflexionando sobre paralelismos con la vigilancia digital actual, advirtiendo que tecnologías modernas podrían replicar un control similar en democracias.

Este trabajo de DW Documental subraya cómo la Stasi no solo reprimió, sino que intentó moldear una sociedad entera mediante el miedo y la delación, dejando un legado que aún resuena en la Alemania unificada.