Una Nueva Oportunidad: La Historia de Ruth y la Urgencia de Donar Órganos

DAVID RAUDALES
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Una Nueva Oportunidad: La Historia de Ruth y la Urgencia de Donar Órganos

El regalo de un órgano puede cambiar una vida para siempre. Para miles de personas, recibir un trasplante es la única esperanza de seguir adelante. Esta es la realidad de Ruth Bopp, quien luchó contra una enfermedad pulmonar incurable durante años. Su historia nos muestra el viaje agotador hacia una nueva vida, la profunda gratitud que siente, y el gran impacto de la donación de órganos. Su experiencia también nos recuerda la enorme necesidad de más donantes en lugares como Alemania, donde las reglas de donación difieren de otros países europeos.

La Lucha de Ruth por Cada Respiro

Ruth Bopp vivió con una grave enfermedad pulmonar llamada fibrosis pulmonar. Esta condición hace que el tejido de los pulmones se llene de cicatrices. Con el tiempo, cada vez cuesta más respirar. El intercambio de oxígeno se vuelve muy difícil. Por más de 30 años, desde que tuvo una neumonía, Ruth sufrió esta enfermedad. Dependió de un tanque de oxígeno durante mucho tiempo. Su vida se volvió una lucha constante por cada aliento.

La enfermedad le quitó muchas libertades. Actividades simples, como subir escaleras o incluso hablar, se convertían en grandes desafíos. La calidad de vida de Ruth disminuyó. Su familia, especialmente su esposo, también sintió el peso de su enfermedad. Verla debilitarse día a día era muy doloroso. La necesidad de un nuevo pulmón era su única esperanza.

La Llamada que Cambió Todo: 20 de Octubre de 2023

La fecha del 20 de octubre de 2023, a las 3:50 de la madrugada, quedó grabada en la memoria de Ruth para siempre. Su teléfono sonó. La llamaron desde la Facultad de Medicina de Hannover. La noticia que recibió fue la más esperada: ¡había un pulmón compatible para ella! La emoción la invadió por completo. Temblando de alegría y nerviosismo, se preparó para el viaje al hospital.

Poco después, una ambulancia la recogió. Dentro de la ambulancia, su nerviosismo disminuyó un poco. La esperanza llenó su corazón. Por primera vez en mucho tiempo, se le presentaba la oportunidad de una nueva vida, una segunda oportunidad para respirar libremente.

El Día del Trasplante

Al llegar a la sala de preoperatorio, Ruth comprendió la magnitud del momento. Era real. Pensamientos de miedo pasaron por su mente, como la posibilidad de no sobrevivir a la operación. Sin embargo, también pensó en su tarjeta de donante. Ella misma estaba dispuesta a donar sus órganos si le pasaba algo. Este pensamiento, aunque difícil, le dio una extraña sensación de paz. Ella sabía que sus riñones y corazón estaban sanos. Podrían ayudar a otra persona.

El Milagro de la Primera Respiración

Cuando Ruth despertó de la anestesia, sintió algo increíble. La primera respiración profunda y vigorosa fue puro placer. Aunque todavía estaba conectada a un respirador, la sensación de poder respirar por sí misma era maravillosa. Las lágrimas de alegría rodaron por sus mejillas. No podía describirlo de otra forma: fue algo fenomenal.

Esta nueva capacidad de respirar significaba poder seguir viviendo. Podría pasar más tiempo con su esposo, su familia y sus amigos. Era un regalo de vida, posible gracias a la decisión de otra persona de donar sus órganos. Este acto de bondad le dio a Ruth un futuro que creyó perdido.

Desafíos en el Camino a la Recuperación

La recuperación después de un trasplante de pulmón no es fácil. Al principio, Ruth tuvo que enfrentar varios problemas. Una semana después de la operación, le encontraron agua en los pulmones. Los médicos tuvieron que hacerle una punción para extraer casi un litro de líquido. Esto fue preocupante, pero ella siguió adelante.

También tuvo que aprender a expectorar y toser correctamente. Los pulmones nuevos tenían que adaptarse y aprender a funcionar bien en su cuerpo. A pesar de los dolores y los efectos secundarios de los medicamentos, Ruth mantuvo una actitud positiva. Su meta era superar el primer año, conocido por ser el más difícil después de un trasplante.

La Rehabilitación: Un Paso a la Vez

El camino hacia la recuperación total pasó por una intensa rehabilitación. Ruth trabajó muy duro cada día. Al principio, solo podía hacer 3 minutos en la bicicleta estática. Pero con su esfuerzo y la ayuda de los terapeutas, logró aumentar a 15 minutos en solo tres semanas. Este fue un gran logro del que se sentía muy orgullosa.

La rehabilitación no solo implicó ejercicios físicos. También tuvo que aprender a respirar de una manera nueva. Cuando usaba oxígeno, solía frenar la respiración con los labios. Ahora, los terapeutas la ayudaban a dejar ese hábito y a respirar de forma normal. La terapia respiratoria era clave para su recuperación. Ruth siempre estaba motivada, incluso cuando no se sentía bien. Su lucha y su sonrisa, incluso bajo la mascarilla, inspiraban a los demás.

Volver a Casa: Alegría y Precaución

Después de muchas semanas en el hospital, Ruth por fin regresó a casa. La idea de pasar la temporada prenavideña horneando galletas con sus nietos era un sueño. Su familia había preparado una habitación especial para ella. Esto era para que pudiera aislarse y evitar infecciones, pues los primeros meses después del trasplante son muy delicados. Cualquier resfriado o virus podría ser peligroso. Ruth entendió la importancia de ser muy cautelosa.

A pesar de la alegría de volver a su hogar, los primeros días en casa no fueron fáciles. Los efectos secundarios de los medicamentos aparecieron. Su corazón no respondía bien, y sus signos vitales no eran los esperados. Se sentía muy cansada y pasaba mucho tiempo acostada. Tuvo que concentrarse en recuperarse antes de poder disfrutar plenamente de su nueva vida en casa. Lentamente, su calidad de vida mejoró, y pudo empezar a hacer pequeñas cosas por sí misma.

La Columna de los Agradecimientos: Un Lugar de Esperanza

La "Columna de los Agradecimientos" fue un lugar muy significativo para Ruth. Se había propuesto visitarla después de su trasplante. Allí, puedes poner tu mano sobre la columna y escuchar las historias de otros pacientes que recibieron diferentes trasplantes. Es un lugar donde se expresa la gratitud a los donantes.

Ruth se conmovió al escuchar historias, como la de Kirstin, quien recibió un doble trasplante de pulmón hace casi dos años y medio. También le impresionó la historia de alguien que llevaba 18 años con un doble trasplante de pulmón. Este lugar es un recordatorio del impacto profundo de la donación de órganos y la fuerza de la esperanza.

Sasha: La Espera por una Segunda Oportunidad

Durante su rehabilitación, Ruth conoció a Sasha. Sasha también necesita un trasplante de pulmón, y su historia resalta la dura realidad de muchos pacientes en lista de espera. Ruth se preocupó al ver a Sasha, quien había bajado mucho de peso.

Para ser incluido en la lista de espera, Sasha necesita ganar al menos 10 kilogramos de peso y masa muscular. Su enfermedad lo ha debilitado mucho. Incluso hablar le resulta agotador. Sasha vive conectado a un tanque de oxígeno las 24 horas del día. Sabe lo que es estar al borde de la muerte; una vez, su oxígeno se acabó, y casi fallece.

Sasha describe cómo las esperanzas se desvanecen cuando te dicen que no puedes entrar en la lista de espera. La idea de "tirar la toalla" se le pasa por la mente. Sin embargo, se aferra a la idea de que "la esperanza es lo último que se pierde". Sueña con poder respirar como una persona normal, algo que Ruth ahora puede hacer. La amistad entre Ruth y Sasha se basa en el apoyo mutuo. Ruth le llevó pastel y le dio ánimo, recordándole que no se rinda y que se cuide.

La Urgencia de la Donación de Órganos

La historia de Ruth y Sasha subraya una realidad crítica: la gran necesidad de donantes de órganos. En Alemania, 8,400 pacientes esperan un órgano con urgencia. Sin embargo, solo hay 965 donantes. La diferencia es enorme.

El sistema de donación en Alemania requiere un consentimiento explícito. Esto significa que solo se puede donar un órgano si la persona lo ha autorizado en vida o si su familia lo aprueba después de su muerte. Esto contrasta con otros países europeos como Francia, España o los Países Bajos, donde se aplica el consentimiento presunto (opt-out). Allí, si no te opones expresamente, se considera que eres donante.

Ruth hace un llamado urgente a la sociedad: "Quien necesita un órgano, lo requiere de inmediato, pero muy poca gente se plantea la posibilidad de donar." Afortunadamente, hay una tendencia positiva. Un estudio reciente de Forsa, encargado por la aseguradora Techniker Krankenkasse, muestra que el 49% de los adultos en Alemania ahora tiene una tarjeta de donante de órganos, un aumento del 41% en 2021.

Un Símbolo de Vida Nueva: El Tatuaje de Donante

Ruth, que ha sido donante de órganos desde los 18 años, ahora considera hacerse un tatuaje especial. Le gustaría un diseño con un brote, que simbolice una nueva vida, en su antebrazo. Su hijo le gusta la idea. Este lugar es visible para los médicos, lo que podría acelerar el proceso de identificación de un donante. Un tatuaje de donante es una forma visible de expresar la decisión de donar órganos, eliminando incertidumbres y facilitando el trabajo de los profesionales de la salud en momentos críticos.

Para más información sobre la donación de órganos o para explorar otros documentales, visite DW Español o DW Documental.

Conclusión: Un Llamado a la Vida

Ruth Bopp, a tres meses de su trasplante, se siente afortunada. Su nuevo pulmón funciona bien, y tiene un futuro con su familia y amigos. Su historia es un testimonio de la lucha, la esperanza y el poder transformador de la donación de órganos. Ella y Sasha representan a miles de personas que esperan una oportunidad para vivir.

La donación de órganos es un acto de generosidad que salva vidas. La decisión de ser donante puede ofrecer una segunda oportunidad a quienes más la necesitan. Considere convertirse en donante de órganos. Su decisión puede ser el regalo más valioso de todos: el regalo de una nueva vida.